Me paso horas del día, recordándote, recordándonos. Paso el tiempo, embobada, sinento que el golpe ha madurado, magullada y a veces, enfadada claro, pero permitiendo que la huella del dolor se vea poco a poco menos profunda, menos oscura.
Hemos vivido tanto, reído tanto, soñado tanto, que ahora a tu lado, a ratos de 11.00 a 13.00 o de 17.00 a 19.00 me reconforta tu abrazo, tu júbilo al reencontrarte.

Me gustaría tanto secuestrarnos, hace 8 años, para siempre, y compartir el limbo de Carrol, saludar a Alicia, robar el corazón, el valor y poder pensar en lo fantástico de estar y ser lo que fuimos, lo que somos.
Siempre seréis lo que sois
Me gustaLe gusta a 1 persona
Ohh Iñaki! Existió un tiempo oscuro y lleno de miedo en el que dudé.
Ya no lo hago.
Abrazo
Me gustaMe gusta